La estrategia de comunicación del Estado Islámico fue el tema central de nuestro VIII Desayuno Postdigital. En él se presentó el reciente estudio realizado por la empresa de medición y análisis de datos Alto Data Analytics en colaboración con Javier Lesaca, investigador de la Universidad George Washington. Recientemente, Neolabels y Alto han alcanzado un acuerdo de colaboración. Gracias a él, ambas se beneficiarán de “las sinergias creadas entre sus distintos ámbitos de especialización”, según señala Hugo Albornoz, fundador y CEO de Neolabels.
Alejandro Romero, fundador y CEO de Alto Data Analytics, aseguró durante la presentación que, según datos de Naciones Unidas, desde 2015 aproximadamente 35.000 personas se han unido al ISIS. Este hecho se engloba dentro de las campañas de comunicación de la organización, marcadas por un retrato joven y fresco muy alejada de la imagen colectiva del terrorismo internacional.
Dentro de esta estrategia, el ISIS utiliza herramientas y canales de comunicación habituales en cualquier empresa u organismo. Entre ellos encontramos notas de prensa, revistas, su propia agencia de noticias digital e, incluso, responsables de Comunicación, formados en muchas ocasiones en países occidentales, con puestos clave dentro de la estructura de la organización
El ISIS genera un gran volumen de contenidos, habiendo creado más de 1.200 campañas audiovisuales en los últimos meses. Destaca también la labor de simplificación de sus mensajes, muy emocionales, dirigidos a un público milennial hipersegmentado.
La violencia como espectáculo
Por otro lado, el ISIS ha sabido ‘aprovechar’ el hecho de que en Occidente el terror y la violencia sean consumidos como entretenimiento, trasladándolo al terreno de la realidad. Así, muchos de los vídeos del ISIS analizados se inspiran directamente en productos de gran consumo occidentales, creando vídeos con personas y situaciones reales inspirados o directamente copiados de series como ‘Homeland’, películas como ‘Matrix’ y ‘Saw’ o videojuegos como ‘Call of Duty’ o ‘Mortal Combat’. Al estar basados en esquemas mentales globales, el ISIS salva las barreras del idioma llegando a cualquier parte del mundo y, además, transmite los mensajes religiosos de una manera muy sutil y subyacente en la narrativa.
¿Qué pueden aprender las empresas y organizaciones?
Alejandro Romero aseguró que “una conclusión que podemos sacar de todo esto y que se puede extrapolar a cualquier empresa u organización es que cuando hay un objetivo claro solo hay que encontrar el mensaje y el canal concreto. Es muy difícil encontrar un terreno más hostil para comunicar que el mensaje del ISIS y, sin embargo y desgraciadamente, lo está consiguiendo, conectando y atrayendo a gente”.