Ahora que está tan de moda la palabra conciliación, ahora que nos preocupa tanto el tiempo que dedicamos a la familia y la vida personal, ahora que tengo un hijo propio y dos postizas (lo llaman nuevos modelos de familia), ahora, justo ahora, empiezo a trabajar en una agencia de comunicación.
Después de varios años trabajando para la Administración Pública -y organizándome el tiempo a capricho-, de repente cambio radicalmente y comienzo a trabajar en una agencia de comunicación digital. Un lugar con un ritmo vertiginoso en el que “hoy ya es ayer” y en el que, por supuesto, “todo es para mañana”.
Afortunadamente, con el tiempo descubres, por un lado, que no estás sola y, por otro, que no es imposible. Simplemente es difícil y requiere de la alineación de varios planetas:
El planeta TÚ. Que no te cuenten cuentos: hay tantos modelos de madre y de familia como mujeres y familias hay en el mundo. Cada una de ellas debería poder organizarse en base a sus prioridades y principios como persona, como familia, como profesional. Por ello, es importante saber dónde estás y dónde quieres estar, qué TIENES que hacer y QUÉ TE APETECE. A partir de ahí ya puedes alinear tu vida en base a tus ideas, no a las de la gente que te rodea.
Planeta PAREJA. En mi caso, decidí tener a mi hijo en un momento en que no tenia pareja y me lancé a la inseminación artificial en soledad. Para aquellas que lo estén sopesando, poder se puede, aunque -lo reconozco- la llegada de un ‘papá’ haya hecho mi vida más fácil. Es importante que el planeta pareja esté por la labor de compartir la crianza. Si no, se puede llegar a convertir más en un estorbo que en un apoyo.
Planeta EMPRESA. Aunque cada vez son más las empresas que apuestan por la conciliación, todavía hay muchas que lo hacen de boquilla, penalizando tener hij@s. La conciliación real conlleva aspectos que se resumen en sentido común y flexibilidad: poder organizarte el horario, hacer jornada continua, elegir los periodos de vacaciones y poder teletrabajar. Ejemplos muy simples y baratos de medidas que las empresas pueden adoptar y que hacen que tu vida de “madre agencia” sea mas llevadera y apetecible. ¡¡Más teniendo en cuenta que estamos en la era digital!! Con toda la tecnología que tenemos a nuestro alcance hoy en día, trabajar no debería ser sinónimo de “presencia”, aunque este tema da para otro debate…
Planeta GUARDERÍA. Sí, cuesta dinero, pero es muy agradecido. No solo cuidan de nuestro ‘tesorete’ durante unas horas al día, también te ayudan en la educación y los hábitos. De este planeta surge otro: el de las MADRES-GUARDERÍA, una red muy valiosa que te echan esa mano que te hace falta cuando surgen reuniones inesperadas, atascos infernales y otros imprevistos típicos de las madres-agencia.
Satélite ABUEL@S. Un satélite o planeta que siempre está ahí y que, reconozcámoslo, no tiene precio, tanto para emergencias como para esos ratos de “tengo una fiesta-cena-sarao” o similar (aunque a las 12 se te cierre el ojo y ni una sesión de los Jumpers Brothers consiga hacerte revivir).
En definitiva, una constelación de planetas que demuestran que se puede ser madre, trabajar en una agencia y sobrevivir. Eso sí, las madres-agencia necesitamos que nuestra empresa esté comprometida con lo que la maternidad/paternidad supone. Así que elige bien tu agencia, déjate de excusas… ¡¡Y disfruta!!.