Es imposible quedar indiferente tras ver un vídeo tan recomendable como éste en el que se describen y califican las cifras como La Revolución de los Datos:
Tampoco queda ninguna duda de que las capacidades de procesar datos progresan más rápido de lo que imaginábamos.
Estos días, tras la estela de las declaraciones del ex agente de la CIA Snowden, hemos ido conociendo que nuestro rastro digital es objeto de análisis por los servicios de información del mundo y en especial del estadounidense, que tiene acceso directo a los nuevos gigantes de Internet como Google, Amazon o Facebook, también estadounidenses.
En el nuevo conflicto entre Estados Unidos y Europa por las escuchas destapadas por el semanario Der Spiegel, leemos que en un “día atareado” la NSA podía procesar hasta 60 millones de llamadas ¡¡solo de Alemania!!
Ya sea con fines de lucha antiterrorista, políticos, para conocer mejor a los consumidores o para crear ofertas más eficaces, el caso es que nuestros datos están siendo procesados diariamente. Google procesa cada día casi 20 petabytes de información (el equivalente a 20 millones de discos de 1 Giga bytes al día). Toda ella es información generada por los usuarios voluntariamente.
En el mundo anterior al de la abundancia de datos, si querías saber algo del usuario tenías que preguntarle y, como hacerlo a cada uno era imposible, había que conformarse con muestras y con la fiabilidad de las técnicas de muestreo.
En un mundo de datos digitales puedes analizar datos del 100% de los usuarios digitales y conocer en detalle todos sus movimientos. El análisis de este volumen ingente de datos se ha convertido en un nuevo El Dorado, en el petróleo del siglo XXI, en una mina por explotar a medida que la publicidad se va desplazando hacia los medios digitales y que los usuarios pasamos en mundos digitales un mayor porcentaje de nuestro tiempo (y dejamos más información sobre nosotros y nuestros intereses).
Nuevas profesiones como la de científico de datos se consideran la nueva estrella del mundo Big Data (de macrodatos en la traducción al español sugerida por la Fundeu). Los primeros pasos fueron dados por el análisis de la información web y dio lugar a una profesión en alza, la de analista web, cuya importancia no ha parado de crecer.
La avalancha de datos ha de ser procesada pero, sobre todo, interpretada y representada. Por tanto, hay que iniciar ese camino. Visualizaciones de datos y su análisis vendrán ayudados de nuevas aplicaciones y tecnologías pero, sobre todo, serán útiles si hacemos las preguntas adecuadas.
Como en toda estrategia, todo pasa por hacerse las preguntas adecuadas y tratar de responderlas con la tecnología existente.
¡¡Bienvenidos a la era del análisis de datos !!